Siempre que se empieza un proyecto web el cliente pide que la
página web se vea correctamente en cualquier dispositivo, ya sea ordenador de sobremesa, tablet o teléfono móvil. La respuesta es obvia: sí y para ello hay dos opciones: la creación de un
app o
aplicación móvil o utilizar el
web responsive design o la creación de una
web móvil. La decisión, sin embargo, no es fácil dado que cada sistema tiene sus ventajas e inconvenientes.
Si un 67% de los consumidores valoran mucho el hecho que la tienda online donde van a realizar la compra esté correctamente diseñada para móviles, sin tener que ser un app, también hay que recordar que un 27% del tiempo que dedican los compradores a comprar online lo hacen dentro de apps móviles. Al final y como sucede habitualmente, la mejor elección es la realización de una web móvil y una aplicación móvil. Sin embargo, como los presupuestos son limitados se debe optar por una u otra opción en función de los objetivos de la empresa.
La opción
responsive web design supone la creación de una web especialmente diseñada para todos los dispositivos y es sin duda la opción más económica, rápida de desarrollar y, por encima de todo, se nutre del posicionamiento web de la página, es decir, es accesible desde Google.
Por lo que respecta a las aplicaciones móviles o apps, debemos tener en cuenta que no son accesibles desde los buscadores como Google y debemos enviar a los usuarios a la aplicación móvil o app por otras vías. Además se deberá desarrollar para Android y para iOS o Windows Phone, lo que encarece el desarrollo ostensiblemente. En su favor, hay que destacar que la experiencia de compra, velocidad y usabilidad en una App es superior a una web móvil y podemos beneficiarnos de funcionalidades como la cámara o el GPS del teléfono móvil del usuario y suele tener acceso a más datos del usuario para ofrecer una experiencia más personalizada. En lo que sí gana con diferencia la aplicación móvil es en la compra por impulso ya que suele ser más fácil para los usuarios realizar compras con tarjeta de crédito previamente almacenadas en la app sin tener que introducirla manualmente cada vez como es habitual en las páginas web.
Desde nuestra óptica, ambos desarrollos son complementarios y dependerá del presupuesto del cliente. Si hemos de elegir una, la decisión se basará en como de importante es el posicionamiento web para la empresa, si es crucial optaremos por la web móvil y, si no, la app ganará enteros.