Si estás digitalizando tu negocio o creando un negocio digital desde cero, seguro encuentras muchos términos que no conoces. La realidad es que, a pesar de que crear un sitio web es mucho más sencillo de lo que parece, existen algunos detalles técnicos que deben considerarse desde el principio para evitar complicaciones futuras. El dominio es uno de estos detalles (no tan detalle).
Antes de contarte qué es un TDL, es necesario aclarar el concepto de dominio y su utilidad para tu negocio online. El dominio es la dirección web de un sitio. A través del dominio, los usuarios pueden encontrar la web que están buscando. Es una denominación única e irrepetible. Al igual que una dirección física, no pueden existir dos dominios iguales.
El dominio web es importante dado que forma parte de la URL. Esto implica que tiene un rol fundamental en la identidad visual del sitio web. A la vez, formará parte del recuerdo de las personas. Es decir, los usuarios lo asocian directamente a la marca.
Es por esto que, comprar un dominio no es tarea fácil. Es necesario adquirir un Dominio Web apropiado para el sitio.
Ahora sí, vamos a lo importante de este artículo. El dominio está conformado por dos partes: nombre de dominio y extensión de dominio. La extensión de dominio es también conocida como TLD. TLD son las siglas de Top Level Domain. En español es Dominio de Nivel Superior.
El nombre de dominio es el que se ubica luego de “www.”. Se encuentra en el medio de la URL. El TLD está ubicado luego del nombre de dominio. Uno de los más conocidos y utilizados es “.com”.
Los TLD pueden clasificarse de diversas formas. Sin embargo, a grandes rasgos, existen dos conjuntos: genéricos y por código de país.
El grupo genérico es denominado gTLD (por Generic Top Level Domain). Estos TLD son aquellos que engloban las distintas extensiones más utilizadas (como “.com”; “.tech”; “.org”; entre otros).
El grupo clasificado por ubicación geográfica o código de país, es denominado ccTLD. En este caso, la extensión está asociada a una región específica. Es el caso de “.es”; “.mx”; “.us”; etcétera.
Elegir una extensión de dominio popular es clave para el posicionamiento SEO y para la confianza de los usuarios. Como mencionamos antes, la más popular es “.com”. Es por esto que, al ser tan elegida, no siempre está disponible para su adquisición.
A continuación, vamos a contarte cuatro factores que debes tener en cuenta para elegir una extensión de dominio popular que se adecúe a tu negocio.
Es fundamental que antes de tomar cualquier decisión con respecto al dominio, definas un rubro y los objetivos del negocio. Esto te ayudará a establecer un plan digital y seguirlo según lo que hayas definido con anterioridad.
El rubro servirá en caso de que quieras elegir una extensión de dominio en base a esta categorización. Por ejemplo, si te dedicas a la tecnología puedes buscar extensiones como “.tech” o “.it”.
La región a la que apunta el negocio, será de utilidad en caso de que quieras usar una extensión según el código de país. Esto te ayudará a tener mejor precisión y brindar mayor información en tu URL.
Hay extensiones que son mucho más reconocidas por los usuarios que otras. Un ejemplo de esto son los TLD por código de país o gTLD como “.com”; “.org”; “.net”; “.info”. Al ser más populares, brindan mayor confianza a los usuarios.
A pesar de que existen extensiones de dominio más económicas y hasta gratuitas, las más populares suelen producir una conversión de impresión a clic (CTR) más alta. Por lo que, a la larga, son más rentables.
Esta tiene que ser la regla que guíe todas tus decisiones relacionadas con la identidad de marca: que sea recordable. Muchas veces, se eligen nombres que, a pesar de que son representativos del negocio, no son sencillos de recordar para los usuarios. Este es uno de los mayores errores. Lo que debes tener en cuenta es que: tiene que ser corto, fácil de pronunciar y sencillo de escribir.
A la hora de elegir el nombre de dominio y el TLD, debes tener en cuenta que mientras más información brindes al usuario, mejor es. No sólo mejorará el CTR sino que, además, beneficiará el posicionamiento SEO del sitio.
Como puedes ver, estos “detalles” influyen mucho en el éxito de un sitio web. Es por esto que debes prestar particular atención a la elección de cada parte del dominio web. Recuerda que tener un sitio web requiere tiempo, dedicación y aprendizaje. Pero no te preocupes, si haces las cosas bien ¡verás pronto los beneficios!
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La importancia de escoger un buen TLD