¿Ayuda al SEO tener muchas visitas a una página web?

Como agencia SEO escuchamos muy a menudo afirmaciones como la de que tener muchas visitas es beneficioso para el SEO, pero ¿es realmente cierto?.

Tener muchas visitas es muy positivo ya que supone que llegamos a un número elevado de clientes potenciales y, además podemos atrevernos a afirmar que un elevado número de clics a nuestra página web provenientes de los resultados de búsqueda de Google o SERPS, es decir un elevado CTR, ayuda al posicionamiento SEO de nuestra página web. Así lo constata Google en una de sus patentes. Dicho esto, no nos atrevemos a afirmar en que grado impulsa el SEO. Lo que sí que es un factor determinante para nuestro SEO es tener un elevado número de clics de una tipología concreta.

No todos los clics son iguales para Google

Lo que sí que está claro es que no todos los clics son iguales para Google. Para Google existen tres tipos de clics: El click corto, el click largo y el último click. Mientras determinados clics mejoran nuestro posicionamiento ya que presuponen una mejor experiencia de usuario en nuestra página web otro tipos de clics lo perjudican. Recordemos que un diseño web profesional es un factor clave para disfrutar de un buena experiencia de usuario.

El click corto o short click se da cuando tenemos un usuario que accede desde Google a nuestra página web y vuelve en poco tiempo a los resultados de búsqueda (SERPS) para acceder a otra página web o a refinar la propia búsqueda.

El clic largo o long click se da cuando el usuario se queda en nuestro sitio web durante un buen tiempo y no vuelve a los resultados de búsqueda de forma inmediata. Es importante entender que hablamos de sitio web y no página web, un cliente no ha de estar en la misma sección o página del sitio web para que cuente como click largo.

El último clic o last click se da cuando el usuario accede a nuestra página web y finaliza su sesión de búsqueda. En otras palabras, ya no regresa a los resultados de búsqueda para visitar otros sitios web.

Google ha ampliado esta clasificación con el concepto click medio o medium click que se situaría entre el click corto y el largo, es decir que el usuario no está ni poco ni mucho tiempo en nuestra web antes de volver a la página de resultados de Google.

¿Cuál es el mejor click?

Obviamente el click corto es el click de peor calidad. El cliente, al volver rápidamente a Google, le está indicando que nuestra página no soluciona la búsqueda realizada y se ve obligado a acceder a otra página web para obtener dicha información. Muchos clics de este tipo es como decirle a Google que la clasificación de nuestra página para una determinada búsqueda no es correcta y Google nos hará retroceder posiciones. El pogo sticking es el caso extremo, el cliente hace click en los resultados de Google, llega a una web y vuelve a las SERPS para acceder a otra web de forma casi inmediata, pasa por ejemplo cuando un cliente consulta un precio para un mismo producto en diversas tiendas online.

Por el contrario, un clic largo y, especialmente, el último click indica que el usuario consigue obtener en nuestra página web la respuesta deseada a la búsqueda realizada y, además, su experiencia de usuario en nuestra página web es buena. Mediante este clic largo enviamos una señal claramente positiva a Google, confirmando que es correcto que dicha web obtenga buenas posiciones para la búsqueda en cuestión.

¿Cómo sabe Google como es nuestra navegación?

Muy fácil, mediante el uso de nuestro navegador. Cuando usamos por ejemplo Google Chrome éste registra y envía a Google todos los datos de nuestra navegación por lo que Google sabe exactamente nuestros itinerarios entre las diversas páginas web y clasifica los clicks. Google nos lo confirma en su propia página web.

Como evitar los clics cortos

Básicamente debemos ofrecer al usuario la información que está buscando. Imaginemos que un cliente está buscando comprar un producto determinado que tenemos en nuestra página web pero no tenemos stock del mismo, deberíamos poder ofrecerle una alternativa de producto que tuviese stock y, si no disponemos del mismo, podríamos optar por la vía más extrema y reenviarlo a un competidor. Sí, has leído bien, dado que el cliente al final va a volver a Google -convirtiendo nuestro click en un click corto- y se irá a un competidor, enviémoslo directamente y que no sea nuestro peor competidor… evitaremos, eso sí, sufrir el clic corto.

Otro ejemplo menos extremo es por ejemplo la táctica utilizada en esta misma noticia donde ponemos un enlace a otra de nuestras páginas para la palabra pogo sticking, evitando así que el cliente se vuelva a los SERPS o resultados de Google a descubrir que es este concepto y lo descubra dentro de nuestra página web quedándose en nuestra página web.

Una práctica habitual para reducir los clicks cortos es el uso de productos relacionados en tiendas online o el uso de noticias relacionadas y preguntas frecuentes en webs corporativas.

Si profundizamos en la extensión de contenidos y en la resolución de preguntas en nuestra propia página web, permitiremos que el cliente pueda obtener una buena experiencia de usuario y cumpla sus expectativas. También es muy importante porqué al ofrecer una cierta profundidad en nuestras respuestas, nos alejamos de la tendencia actual de Google de responder directamente las preguntas simples sin salir de Google.

Conclusión: guiemos a nuestro usuario por nuestro contenido

El número de clics de una página web no afecta directamente a nuestro SEO, sin embargo, la proporción de clics cortos sí que afecta a nuestro posicionamiento web de forma negativa. Debemos intentar ofrecer a nuestro cliente la información que busca y, si es necesario, moverlo por nuestra web de una página a otra, pero evitar que vuelva directamente a las SERPS o página de búsqueda de Google. Es decir, ofrecer contenido único y de forma atractiva, permitirle profundizar en la información que busca dentro de nuestra página web.